Oportunidades del Nearshoring en México en el Contexto de Tensiones Comerciales con EE. UU. y China
En los últimos días, las tensiones entre Estados Unidos y México han aumentado debido a problemas relacionados con la inmigración ilegal y el comercio que México mantiene con China en industrias clave como la automotriz. Este escenario plantea desafíos significativos, pero también abre oportunidades para el nearshoring, una estrategia que implica subcontratar servicios y procesos a países cercanos geográficamente. Este modelo tiene el potencial de posicionar a México como un socio estratégico para Estados Unidos en un momento crucial para las relaciones comerciales de América del Norte.
¿Qué es el nearshoring y por qué es relevante ahora?
De acuerdo con la definición de Wikipedia, el nearshoring se refiere a la transferencia de procesos o servicios a un país cercano para reducir costos y aprovechar ventajas logísticas, culturales y de zona horaria. En el caso de México y Estados Unidos, esta práctica se ha consolidado gracias al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que facilita el comercio y asegura la integración de las cadenas de suministro.
Con las crecientes presiones arancelarias del gobierno estadounidense, existe la posibilidad de que México se vea obligado a priorizar el comercio exclusivo con Norteamérica. Si bien esto podría limitar la diversificación de socios comerciales, también crea una oportunidad para fortalecer la posición de México como un destino ideal para inversiones en manufactura, tecnología y comercio electrónico (eCommerce).
Impacto de las tensiones comerciales en la industria automotriz
El sector automotriz es uno de los más afectados por estas tensiones. Según datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), México exportó vehículos y autopartes por más de $78 mil millones de dólares a Estados Unidos en 2022. Sin embargo, el comercio con China en esta industria ha generado preocupación en Washington, debido a su dependencia en componentes clave como baterías para vehículos eléctricos.
Las amenazas de aumentar los aranceles a productos mexicanos representan un desafío, pero también una oportunidad: atraer empresas estadounidenses que buscan reducir su dependencia de China y fortalecer sus cadenas de suministro a través del nearshoring en México. Esto permitiría a las empresas acceder a mano de obra calificada, costos competitivos y una ubicación estratégica.
El papel del eCommerce en el nearshoring
El comercio electrónico ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años. Según la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), las ventas en línea en México crecieron un 27% en 2022, alcanzando un valor de más de $500 mil millones de pesos. Esta tendencia no solo transforma la forma en que los consumidores adquieren productos, sino que también impulsa la inversión en infraestructura logística y tecnológica.
Para las empresas que adoptan el nearshoring, el eCommerce es un aliado estratégico. La cercanía geográfica facilita entregas más rápidas, reducción de costos y un servicio al cliente más eficiente, elementos clave para satisfacer las expectativas de los consumidores modernos.
Oportunidades y beneficios para empresarios mexicanos
A pesar de las tensiones comerciales, el nearshoring presenta diversas ventajas para México:
1. Atracción de inversiones extranjeras: Empresas estadounidenses que buscan relocalizar operaciones encontrarán en México un socio confiable.
2. Crecimiento de empleo: El nearshoring puede generar miles de empleos en sectores como manufactura, tecnología y logística.
3. Desarrollo de infraestructura: La inversión en transporte, puertos y tecnología será esencial para soportar el aumento en la actividad comercial.
4. Fortalecimiento del comercio local: Las cadenas de suministro integradas en México impulsarán a proveedores locales y pequeñas empresas.
¿Qué esperar para el futuro?
De cara a 2025, se anticipa un incremento significativo en la relocalización de operaciones hacia México. Según un informe de Deloitte, el nearshoring podría contribuir hasta un 3% al PIB de México en los próximos cinco años si se gestionan correctamente las oportunidades.
Sin embargo, México deberá enfrentar desafíos como mejorar la seguridad, fortalecer el estado de derecho y garantizar la competitividad en costos. Además, será crucial mantener un diálogo abierto con Estados Unidos para evitar conflictos mayores que puedan obstaculizar el crecimiento.
Conclusión
Las tensiones comerciales entre Estados Unidos, México y China presentan un panorama complejo pero lleno de oportunidades para el nearshoring. Al posicionarse como el socio estratégico más confiable para Estados Unidos, México tiene el potencial de convertirse en un líder en manufactura y comercio electrónico en América del Norte. Para los empresarios mexicanos, este es el momento ideal para invertir en infraestructura, tecnología y servicios que les permitan capitalizar esta tendencia y garantizar un crecimiento sostenido en los próximos años.